Pasó diciembre cargado de competiciones, finalizó 2014. Comenzó un nuevo año con nuevos objetivos o, simplemente, otro mes más en medio de la temporada.
Parte del grupo de entrenamiento, tras haber superado las citas planteadas como uno de los objetivos de temporada, se encuentra en fase de descanso activo. Momento para el análisis, valorar los resultados obtenidos, tomar decisiones, plantear nuevos retos. Retos más que dispares entre sí pero con una alta dosis de motivación, de ilusión. Mejorar marca en 10 kilómetros en ruta, pruebas de ultra trail o la intención de competir un poco de todo, desde pruebas de 5 kilómetros hasta medio maratón. Buscaremos la combinación idónea.
Otros, de cara a las pruebas de ruta de primavera, incrementando la carga de volumen e intensidad. Sesiones de cuestas de distancias medias a intensidad progresiva, cambios de ritmo, repeticiones cortas con recuperaciones en según frecuencia cardíaca, rodajes largos incluyendo ritmos medios o, cómo no, sesiones de repeticiones largas (1000, 2000, 3000…). Todo ello con un concienzudo, programado, metódico trabajo de condición física que nos permitirá entrenar más y mejor según avancen las semanas.
Los maratonianos, en el mes decisivo para el maratón de Sevilla. Trabajo en gimnasio, sesiones de potencia aeróbica, largos rodajes que por rutina parecen dejar de serlo incluyendo cambios de ritmo, “tiradas largas” quincenales… Alto volumen de kilometraje alternado con semanas de descarga que aprovechamos para disfrutar del buen estado de forma en determinadas competiciones. Semanas de cara en las que uno tiene la sensación de estar siempre cansado, salvo cuando entrena.
El resto, en plena temporada de campo a través, “afinando” para llegar en un estado óptimo de forma a las fechas clave: Campeonato Autonómico de Campo a Través de Castilla-La Mancha, Castilla y León o Madrid. Sesiones de calidad agónicas que ya se disfrutan, en las que uno ya “funciona”, se ve bien por los meses de trabajo acumulado previo. A la vez, manteniendo los niveles de fuerza desarrollados a lo largo de la temporada sin que éstos incidan negativamente a la hora de correr rápido. Nos olvidamos de los típicos circuitos de fuerza general, de las sesiones de pesas, e incluimos puntuales sesiones de multisaltos combinados con repeticiones lácticas.
Cada cual a lo suyo, pero a la vez aprovechando el grupo de entrenamiento en puntuales sesiones de calidad.